Curaduría: Magdalena Zavala Bonachea
De acuerdo con Miquel Adrià, la obra de Paloma Torres «se sitúa en un territorio donde se encuentran y solapan la escultura y la arquitectura […] Sus columnas son autónomas, son hitos que se conmemoran a sí mismas. Son objetos. En arquitectura, lo que cuenta es el espacio que se libera entre columnas. Quizá suceda lo mismo en el bosque». A propósito de las columnas de Paloma Torres, la escritora Mónica Lavín apunta que estas se traslapan a «la columna vertebral que sostiene a una sociedad manteniendo las tradiciones y raíces de los migrantes. Las grietas indicadas con oro, son sus marcas de resiliencia».
Trayectos de la mirada es una exposición con una curaduría ex profeso para el Museo de Arte e Historia de Guanajuato, con una génesis en la columna, partiendo de su propuesta estética en cerámica a la vez que se nutre la nueva serie de Paloma Torres: naturaleza restaurada, producción con base en restos de árboles muertos o derribados. La madera como metáfora de historias familiares resilientes, transformaciones matéricas para sostener la humanidad.
Para Paloma Torres, el espacio sostiene el espíritu de la sociedad: «Hago estas columnas porque lo que a mí me gusta es poder transitar entre ellas […] El vacío entre las esculturas es como el silencio en la música».
Sala de Esculturas, 19:00 horas
Sin costo
Registro en redes sociales a partir del lunes 19 de septiembre
Vino de honor
